Cuando mis sentidos advierten tu cercanía, no hay modo de detener el huracán
es como si despertaras mis Diosas hambrientas. atadas, encarceladas, gritan para poder salir...
Cuando la cercanía se hace una conmigo, ya no hay vuelta atrás...
abres las puertas a todas ellas....tomas una a una las llaves doradas, y abres sus calabozos de
barrotes de azúcar..
no hay forma de callarlas....no hay manera de que permanezcan mas en la sombra...
Cuando mis sentidos dejan de percibir tu cercanía...ellas gimen como lobas heridas...
lentas y aletargadas, entran a sus pozos, sótanos, y celdas....se suben a sus arboles frondosos bajo la luna llena
El día que el clan de Diosas, desate sus amarras, abran sus esposas....
Susurrare en tu oído, al ras de tu cabeza apostada en mi almohada,
Átame
