Anoche leí un rato el tarot de Marsella
Y luego de hacer una que otra pregunta validando mis percepciones, le pregunte
Que es la vida ?
y me respondió: Es el equilibrio entre lo oscuro y lo luminoso"
La respuesta me dejo una ternura en el alma y un respiro largo y lento, como esos suspiros míos que son señales de profundidad de algo mas grande e inentedible que yo.
Y pienso en realidad que no soy tan loca cuando opino, que si algo difícil me ocurre, en vez de patinar en el drama, me salgo de el, en un salto, lo miro en perspectiva, y sencillamente lo hago diferente, porque la vida es elegir y observar que ocurrió con la elección que hice, que sencillamente no me funciono, sin tildarla de buena o mala, dos mas dos son cuatro, no obtuve el resultado esperado.
Acto seguido, según sea el caso, pruebo de nuevo, elijo esta vez diferente, pero si solo me limito a errar, y buscar otro camino., alternativa, opción. iré como ciega, tanteando en la oscuridad de la conciencia, " Hay!, por aquí no es tampoco! " , " Hay si, esto si es..." " Hay no me equivoque otra vez".... porque eso es inocente, eso es perder el tiempo....
Entonces cuando algo no fue como espere o soñé, en vez de sentarme a llorar indefinidamente y nadar en la historieta novelesca, me detengo a evaluar que hice que pude haber fallado? y no para seguir detenida ahí, meditando toda la vida como un monje Zen, sino para " APRENDER", y elegir distinto...., prueba superada, experiencia vivida....eso va destilando mi sabiduría para cada vez sentirme mejor y tener menos fallos, eso es crecer. eso es Aprendizaje transformacional, dejo entonces de culpar al mundo, y a toda cosa " externa" que se mueva dejo de endosarle la situación, la miro y reconozco en mi, la mastico, me hago cargo, como adulto. y cambio de rumbo, me muevo hacia la solución y esto supone un cambio una nueva perspectiva y finalmente un nuevo aprendizaje. (Administración de las experiencias)
No es culparme tampoco y flagelarme , pensando en lo bruta, mala, estúpida, inocente, perversa,..que puedo ser por haber fallado, esas etiquetas me comerían y serian grilletes que no permitirían tomar nuevas decisiones desde la conciencia, estériles improductivas y castrantes.
Simplemente si tengo que llorar lloro, muy bien, porque anestesiada no estoy, pero lloro de la alegría de haber aprendido algo nuevo y haber obtenido experiencia, si falle o no falle, igual siempre sera ganancia, pudieran ser hermosas cicatrices de guerra, que me recuerdan con alegría que por ahí no era, y que ahora he crecido mas.
En definitiva como dice Osho, la vida es viviendo, latiendo con ella, pulsante, una día abajo y otro arriba, un día en la cresta y otro en el valle.
La vida eso, bailar mágicamente entre lo oscuro y lo claro, lo profano y lo sacro....
Mejor respuesta no hubo anoche.
La vida es una moneda con sus dos caras maravillosamente opuestas, lo que hacemos con la moneda que nos dan puede ser tan grande o inútil como queramos.
