Y lo aderezas con un sabor de salsa exótica diciendo, - Tranquila, no te voy a besar- y mas allá un..
- Confía en mi -
Yo me constriño, y luego me dilato como las pupilas de gato....como quien huele el peligro a leguas...
De repente cierro los ojos y los aprieto como rendida a un disparo a quemarropa...justo instante en que te separas unos centimetros y dejas de aspirarme....
Entonces te acercas súbitamente a mi rostro. y el beso termina en mi frente. Respiro...y puedo abrir los ojos....
Es la sensación de estar a salvo....de mi propia cárcel....
Raro....
Narcotico...
Sigo sintiéndome feliz cuando me hueles como perro hambriento....buscando miel...entre algunas espinas.